En Deut.29:29 leemos:
"Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos”.
Esto significa que las cosas REVELADAS son entendibles. Y no podemos decir: “ESTO LO SABREMOS CUANDO VENGA CRISTO”.
En el libro de Isaías Cáp.44:7 y 8 dice:
¿Y quién proclamará lo venidero, lo declarará, y lo pondrá en orden delante de mí, como hago yo desde que establecí el pueblo antiguo?...
¿No te lo hice oír desde la antigüedad, Y TE LO DIJE?
Dios desde un principio hizo OIR lo que VENDRIA, lo DECLARO, y lo PUSO EN ORDEN.
Y todas las cosas se fueron sucediendo. De esta manera se puede confiar en las cosas futuras por venir que también han sido reveladas.
En Isaías 42:9 también leemos:
“He aquí se cumplieron las cosas primeras, y yo anuncio cosas nuevas; antes que salgan a luz, yo os las haré notorias”.
En Daniel leemos lo de la sucesión de reinos que vendrían antes la venida de Cristo por segunda vez.
Todo se cumplió: Babilonia, Medo-persa, Grecia, Roma, “los diez reinos” que le sucedieron y que no se unirían hasta que formasen una confederación para darles autoridad a la “bestia”, como hoy los conocemos; “la unificación europea”. Aquellos “diez reinos” fueron:
1) Los Visigodos,
2) Los Vándalos,
3) Los hunos,
4) Los Hérulos,
5) Los Ostrogodos,
6) Los Bizantinos,
7) Los Lombardos,
8) Los Anglos,
9) Los Sajones,
10) Y los Merovingios.
Todas estas cosas profetizadas, anunciadas por el Señor, tuvieron un minucioso y perfecto cumplimiento, el que se puede corroborar en cualquier libro de historia universal.
El investigador bíblico podrá comprobar el cumplimiento de cientos de profecías bíblicas, de las características ya citadas.
Es evidente que la voluntad de Dios es siempre revelar sus planes. LA BIBLIA ES LA FOTOCOPIA DEL LIBRO DE PLANES QUE DIOS TIENE EN EL CIELO.
En el libro de Hechos Cáp.2:23 leemos:
“A este, entregado por el DETERMINADO CONSEJO Y ANTICIPADO CONOSIMIENTO de Dio, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole;”
Y en este mismo libro dice también:
Hch.4:27 “Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel,
Hch.4:28 para hacer cuanto TU MANO Y TU CONSEJO habían antes DETERMINADO que SUCEDIERA”.
Y como ya lo habia DETERMINADO, Israel lo tendría escrito en las escrituras, para que ellos supieran lo que ocurriría.
Vea Salm.2:2, 6.
Podemos ver entonces, que fue ocurriendo a lo largo de toda la historia, las cosas determinadas por Dios desde el principio.
Por eso leemos tantas veces aquellos evangelios: “Y ESO SUCEDIÓ PARA QUE SE CUMPLA”…
Así leemos entonces que:
Mat.2:14 Y él, (José), despertando, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto,
Mat.2:15 y estuvo allá hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliese lo que dijo el Señor por medio del profeta, cuando dijo: “De Egipto llamé a mi Hijo”.
Y también en Mateo.2:14, 15
Mat.2:22 Pero oyendo que Arquéalo reinaba en Judea en lugar de Herodes su padre, tuvo temor de ir allá; pero avisado por revelación en sueños, se fue a la región de Galilea,
Mat.2:23 y vino y habitó en la ciudad que se llama Nazaret, para que se cumpliese lo que fue dicho por los profetas, que habría de ser llamado Nazareno.
O aquello de:
Mat.26:53 ¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles?
Mat.26:54 ¿Pero cómo entonces se cumplirían las Escrituras, de que es necesario que así se haga?
Esto indica que todos caminamos por un camino ya trazado y del cual no se puede desviar. Que esta todo escrito, con todo detalle, y a eso debemos ajustarnos.
Para que nosotros tengamos esta guía.
ANTES “Lo hizo a través de sus profetas”
HOY “Por el hijo” Heb.1:1, 2.
Jesucristo dijo en:
Jn.16:13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
Así como los antiguos, también a nosotros El Señor nos guía, pero por medio de su palabra.
El apóstol Pedro afirmo diciendo esto:
2Pe.1:19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones.
Esto nos muestra que siempre fue el propósito de Dios que tengamos una revelación permanente.
Este es el propósito de Dios, de que todo el tiempo nosotros sepamos sus planes, para que nos pongamos en tono con ellos, y no andemos a ciegas.
Antes, dijimos, lo hizo dando a conocer las cosas por medio de “los profetas” Heb.1:1, 2.
Hoy por “el Hijo”.
Justamente Apocalipsis es: “LA REVELACION DE
Y es la “revelación” para la iglesia en todos sus tiempos en Apocalipsis leemos:
Apoc.22:16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en LAS IGLESIAS…
Nosotros creemos que todo el nuevo testamento fue inspirado por el Espíritu Santo, al igual que el antiguo testamento.
Pero el único libro del nuevo testamento que expresamente fue mandado a escribir por el Señor, como el caso de Moisés y los profetas, es el Apocalipsis.
Allí leemos:
Apoc.1:19 Escribe las cosas que has visto…
Por este encabezamiento:
Apoc.1:4 Juan, a las siete iglesias que están en Asia…
Incluso es el único libro del nuevo testamento que tiene mandamiento expreso del Señor bajo pena de muerte, por su alteración, es un mensaje que no se puede alivianar, ni mal interpretar, y menos aun cambiar.
Jesús sentencio:
Apoc.22:18 Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro.
Apoc.22:19 Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte DEL LIBRO DE LA VIDA , y de LA SANTA CUIDAD
También leemos:
Apoc.1:3 Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca.
¿Quién es “bienaventurado”?
“El que lee”, en el griego es: αναγινωσκων (ANAGINOSCOS) que significa: “el que lee en voz alta”, que es el que lo lee en la iglesia. Evidentemente es alguien que realmente ama a Dios, a su palabra, a sus hermanos y quiere darlo a conocer.
Después dice: “los que oyen” en el griego es: ακουοντες (ACOUNTES) que significa: “oír y entender. Nos solamente el que escucha.
“y guardan”… en el griego es: τηρουντες (TEPOUNTES) QUE ES: observar, obedecer, hacer caso y que es lo opuesto a ignorarlo.
Por eso leemos al final del librote la traducción Dios llega al hombre:
Apoc.22:7 "¡Vengo pronto! ¡Dichoso el que hace caso del mensaje profético que está escrito en este libro!"
Pero hay algo que tenemos que tener muy en cuenta.
El cielo reconoce como siervos de Dios a aquellos que “Hacen caso de lo que está escrito en este libro. Adora a Dios." Apoc.22:8.
¿Quiénes ENTENDERAN ESTE LIBRO?
Este libro esta escrito a través de “signos”, “señales” y “símbolos”.
Una traducción de la parte final del verso 1 del Cáp.1 tomada directamente del griego es: “y El envió a su ángel y mediante este la presento en señales a su siervo Juan”.
La palabra griega para “señales” que se encuentra en el primer versículo es: εσημανεν (“ESEMANEM”) que nuestras traducciones lo dejan sin traducir.
El secreto para la correcta interpretación para este libro, es saber que generalmente todo es símbolos.
Ahora bien, su interpretación esta al alcance de:
“SU DESTINATARIO”
“LA VERDADERA IGLESIA
Cuando el Señor Jesús hablo en parábolas, sus discípulos les preguntaron: “¿por que hablas en parábolas?” El respondió:
Mat.13:10 Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas?
Mat.13:11 El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
El pueblo de Israel era la iglesia de Dios nominalmente hablando, pero la iglesia verdadera era la que seguía a Jesucristo. Aquel “rebaño pequeño” Luc.12:32, que lo reconoció y que fue traído hacia El, por el Padre Jn.6:44; 6:65; Mat.11:25 – 27; Rom.11:7, es decir, “el remanente” Rom.11:5.
Este “remanente” es el que entendió que Jesús era el Ungido de Jehová Luc.2:25 – 38 es a estos a quienes el Señor revelo el momento del nacimiento del Redentor, y el lugar, y NO a la “iglesia antiguo-testamentaria” Luc2:8 – 15.
La iglesia hebrea solo sabía el lugar del nacimiento, por el conocimiento de las escrituras, pero no la revelación para recibir el momento justo de El, Mat.2:1 – 11, el tiempo establecido por Dios por la visitación de Israel.
Luc.19:44; Gal.4:4; Dan.9:24 – 27. etc.
Es que la biblia puede ser leída y estudiada por todos, pero es muy difícil ver en las escrituras, que su interpretación esta al alcance solo de sus “siervos” del Señor, y que el Señor solo a ellos revela sus planes:
Amo.3:7 Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.
Estos “siervos” son los que a lo largo de la historia sagrada, tuvieron las revelaciones divina de sus planes, y el discernimiento para entenderla y aplicar las verdades bíblicas.
En el evangelio leemos:
Mat.2:15 y estuvo allá hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliese lo que dijo el Señor por medio del profeta, cuando dijo: De Egipto llamé a mi Hijo.
Ahora, cuando usted lee el libro del profeta de donde se toma esa escritura, Óseas.11:1 y lee sus contextos, sin la revelación, nunca concluirá que se aplica al Mesías, ya que interpretaría que se refiere a Israel.
Pero Mateo, como “siervo” que tiene la revelación, le da divina interpretación.
Dios les siga a usted bendiciendo hasta la próxima si Dios lo permite amen.
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